A Night At The Opera

A Night at the Opera ("Una noche en la ópera") es el cuarto álbum de estudio de la banda británica de rock Queen. Fue publicado originalmente en 1975. Fue, en el tiempo de su lanzamiento, la producción más cara. El álbum, al igual que el siguiente álbum, A Day at the Races ("Un día en las carreras"), de 1976, toma su nombre de la película de los hermanos Marx del mismo nombre, que la banda vio una noche durante la grabación.

Trasfondo[]

A pesar de que tenía dos álbumes y dos sencillos suyos entre los diez primeros puestos, Queen estaba en serios apuros económicos al inicio de 1975. Haber ido de gira y grabado sin descanso durante cinco años todavía no había dado beneficios, lo que empezaba a levantar sospechas en el grupo. John se había casado con su novia, Veronica, en enero, y pidió a los mánagers de la banda, Norman y Barry Sheffield, un adelanto de 5.000 libras para la fianza de una casa, que fue negado de forma rotunda. Freddie empezó a querer más decoración para su piso y tenía en mente comprarse un piano para su uso personal, pero de nuevo, los adelantos fueron rechazados.

Aparte de eso, los problemas de salud estaban aumentando entre la banda. Aunque Brian se había recuperado de su episodio de hepatitis y gangrena por el cual había pasado en la primavera de 1974, ahora la voz de Freddie estaba empezando a causar problemas y varios conciertos de su gira por Estados Unidos fueron cancelados para que pudiera relajar su garganta. Al principio se dijo que se habían formado nódulos en su ganglio linfático y que tres meses de descanso eran la única cura, pero una segunda opinión reveló que su garganta estaba demasiado hinchada y que solo necesitaba una o dos semanas para recuperarse. A inicios de agosto, fueron a los estudios Elstree en Hertfordshire a ensayar.

Sin embargo, era comprensible que la banda estuviera exhausta en la primavera de 1975, después de haber terminado su larga gira (que había incluido por primera vez a Japón en mayo). Tomándose un tiempo para su vida personal, Brian May viajó a Tenerife para sus estudios sobre astronomía. Ya se habían empezado a hartar de los hermanos Sheffield, y la banda contrató los servicios de Jim Beach, el cual inició negociaciones para cortar todos los lazos con los anteriores mánagers. Aunque el proceso se hizo eterno, al final terminaría siendo bueno para la banda a la larga – aunque les costó 100.000 libras, y sus antiguos mánagers recibirían el uno por ciento de los beneficios de los seis discos siguientes del grupo. Su nuevo encargado, John Reid, convenció a la discográfica que les dieran enormes cantidades de dinero para poder grabar "el mejor álbum posible", sabiendo bien que era un riesgo, pero afortunadamente para la banda, valió la pena correr con el mismo, ya que gracias a la inversión de EMI pudieron alquilar numerosos estudios de la más alta calidad.

Grabación[]

Con esto en mente, la banda fue a los estudios de grabación para comenzar a grabar su cuarto álbum, al cual más tarde Brian llamaría «nuestro Sgt. Pepper». Las sesiones comenzaron el 24 de agosto en los estudios Rockfield al sur de Gales, durante las cuales grabaron las pistas de fondo de los temas (piano, bajo y batería, especialmente). Después se fueron a Londres y alquilaron simultáneamente los estudios Olympic, Sarm, Scorpio y Lansdowne, así como la sala de conciertos Roundhouse. La razón fue que uno o varios de los integrantes de la banda trabajara en un tema, y los demás en otro, al mismo tiempo, sin necesidad de sentarse a esperar que cada uno terminase. También había una cuestión de cercanía, ya que todos los estudios estaban a 20 minutos o menos (en automóvil) de la casa de cada uno de los integrantes (que de por sí vivían muy cerca).

Por otro lado, algunos estudios tenían mejor sonido para una cosa pero no para otra: a Queen nunca le gustó cómo quedaban las voces en Rockfield, así que cuando se trataba de cantar grababan en Londres; el eje central de este álbum fueron los estudios Sarm (después bautizados Sarm East), que contaban con una excelente acústica debido a que fueron diseñados por un pianista profesional. Todo el álbum fue mezclado ahí, y se realizaron numerosas grabaciones, incluyendo partes de "Prophet's Song" y "Death on Two Legs".

Al igual que su antecesor, el álbum experimenta con el sonido estereofónico. Se usaron múltiples capas de guitarra de su antecesor como base, el álbum experimenta con diversos géneros. El deseo del grupo de experimentar había crecido de una forma exponencial desde las últimas sesiones de grabación, y se convirtió en otro caso de «triunfar o fracasar».– mientras ellos ya habían pasado el proverbial límite de los tres álbumes, y necesitaban un sencillo de enorme éxito para consolidar su fama de una forma firme. Un sencillo como Bohemian Rhapsody. La canción fue una de las verdaderas primeras integraciones de pompa y circunstancia en el rock. Mientras que muchas canciones y discos habían combinado sonidos operísticos con rock (como The Man Who Sold The World de David Bowie, o Tommyde The Who), esta era la primera vez que la ópera como arte se había fundido con el rock. Grabar el tema les llevó tres semanas de principio a fin. Algo que fue confirmado más tarde por Brian y Roger es que habían grabado tanto las cintas que se estaban empezando a trasparentar; y cuando la banda ponía la cinta al trasluz, se asustaban de poder ver a través de ella.

MV5BMTYyNjgwMDg4NF5BMl5BanBnXkFtZTgwNTQ5MTM4MTE@ — Cartel de la película que inspiró el título del álbum

Al final de las sesiones, el grupo decidió apostar por la obra de seis minutos como el primer sencillo del disco, pero sin editarla para que durase menos y funcionara mejor en la radio. Incluso el siempre confiado Freddie estaba empezando a dudar de sí mismo, así que le dio la canción a su amigo Kenny Everett, que por aquel entonces era un DJ en la BBC, y le pidió su opinión. Después de escucharla por primera vez, un impresionado Kenny respondió: «Oh, olvídate de eso. Podría durar media hora, pero va a ser un número uno durante siglos». Entonces Freddie dio a Kenny la cinta, pero le hizo prometer que no la pondría en la radio. Kenny lo juró en un primer momento, pero fue la puso de todas formas -catorce veces en dos días-, lo que al principió espantó a la banda, pero que causó una gran demanda de la canción, resultando en un rápido lanzamiento del sencillo el 31 de octubre de 1975.

El rugido del Queen clásico presidió Death On Two Legs (Dedicated to...) (escrita por Freddie sobre sus antiguos mánagers, aunque, para protegerse de forma legal, sin mencionarlos), el tema de Roger I'm In Love With My Car, y el de Brian, Sweet Lady. Las canciones de Freddie Lazing On A Sunday Afternoon y Seaside Rendezvous fueron afectuosos homenajes al vodevil de los años veinte, mientras que Good Company, de Brian, recordaba a cualquier disco de The Kinks lanzado avanzados los ochenta. La canción de John You're My Best Friend fue un sencillo pop, mientras que la balada Love Of My Life, escrita por Freddie para Mary Austin, perduraría en los conciertos durante las décadas siguientes.

Otra obra épica creada durante las sesiones fue The Prophet's Song, basada en un extraño sueño que tuvo Brian en el que la Madre Tierra se vengaba de sus habitantes. Durando ocho minutos de reloj, la canción fue considerada como posible sencillo, aunque el largo interludio vocal hubiera sido acortado. Otra canción de Brian, el folk espacial '39, se convertiría en la cara B de You're My Best Friend en mayo de 1976, y es una de las dos canciones del disco en las que Brian es la voz líder.

El gran final fue un arreglo del himno nacional británico, que había sido cantado por la audiencia en los conciertos en el Reino Unido, mientras esperaba que la banda saliese al escenario. La canción en verdad había sido grabada durante las sesiones del disco Sheer Heart Attack en los Estudios Rockfield, y fue usada desde octubre de 1974 hasta agosto de 1986, y otra vez durante la gira de Queen + Paul Rodgers, para proclamar el final de los espectáculos de Queen.

Lanzamiento[]

Queen+-+A+Night+At+The+Opera+-+Back — Parte trasera de la carátula.

El álbum fue lanzado en noviembre de 1975 – apenas dos semanas después de que el sencillo de Bohemian Rhapsody entrara en las listas británicas – y alcanzó el número uno en el Reino Unido y el cuarto en los Estados Unidos, la primera vez que un álbum de Queen penetraba entre los diez primeros. Bohemian Rhapsody llegó a la primera posición en el Reino Unido y la novena en los Estados Unidos, mientras que el sencillo siguiente, You're My Best Friend, obtuvo el séptimo puesto en el Reino Unido y el decimosexto en los Estados Unidos. El álbum ha sido sometido a varios re-lanzamientos con el paso de los años, incluyendo la re-edición de Hollywood Records en 1991 que puso re-mezclas de You're My Best Friend y I'm In Love With My Car como pistas extra. El álbum también fue mezclado en sonido 5.1 surround y lanzado en DVD-A en el año 2002 y 2005, con los dos discos de la edición del treinta aniversario, presentando ambos un CD remasterizado y el DVD-A. Destaca el documental del año 2005 The Making Of A Night At The Opera, en el cual Roger y Brian, junto con personas variadas (productores, ingenieros, compañeros, ejecutivos del estudio, críticos de rock) analizan el álbum entero. También incluye la interpretación de "'39" de la gira del 2005 y a Brian May interpretando "God Save the Queen" sobre el techo del Palacio de Buckingham.

El grupo supo muy pronto que tenían algo especial entre manos, e invitaron a la prensa para una escucha especial del álbum solo días antes de que la banda debiera salir de gira otra vez. El álbum había estado siendo mezclado horas antes, e intensos cambios y ediciones fueron hechos después, pero el consenso general fue que Queen había grabado un disco brutal, y que destrozaba a los tres anteriores.

Lista de canciones[]

Versión de vinilo

Lado 1:

Lado 2:

1991 Hollywood Records CD

2011 Universal Records CD

Disco 1:

Disco 2 – Bonus EP:

Vídeos exclusivos extra de iTunes:

Sencillos[]

Personal[]

Freddie Mercury: piano, compositor, voz, orquestación.
Brian May: banjo y ukelele, guitarra, koto, voces adicionales, voz principal en «'39» y «Good Company».
John Deacon: bajo, piano eléctrico, contrabajo.
Roger Taylor: percusión, batería, voz principal en «I'm in Love with My Car», voz de trompeta en «Seaside Rendezvous».
Roy Thomas Baker: productor.
Mike Stone: ingeniero de sonido.

Reseña[]

Winnipeg Free Press, 1976[]

Queen, un cuarteto británico cada vez más popular que ha demostrado un gran talento para tocar y componer en sus tres álbumes anteriores, sigue perfeccionando y perfeccionando su arte en su último esfuerzo, el acertadamente titulado A Night On The Opera.

Hay pocos instrumentos capaces de igualar las potencialidades de la voz humana, como la banda ha demostrado en muchas ocasiones en el pasado. A Night At The Opera marca un intento consciente de la parte del grupo de aumentar sus seguidores en Norteamérica por medio de un enfoque musical más comercial y casi poppista que acentúa las impresionantes habilidades vocales de los cuatro miembros de la banda de manera más pronunciada que su ardiente trabajo instrumental.

No te hagas la idea de que A Night At The Opera constituye el intento de Queen de hacer ópera ligera. Todavía hay mucha potencia de fuego que los aficionados esperan del grupo, aunque el énfasis general está en el lado más silencioso y apagado de la diversa estructura musical del grupo. Ayudado por el siempre magnífico trabajo de producción de Roy Thomas Baker (también debería estar detrás de los controles del próximo LP Sunburst Finish de Be-Bop Deluxe después de hacer un trabajo tan magnífico en Futurama, el cantante líder extraordinario Freddie Mercury - junto con el genio de la guitarra Brian May, el baterista Roger Taylor y el bajista John Deacon - servir un número de pasajes vocales exquisito.

El tremendo canto del grupo es especialmente evidente en una sección totalmente a capella de The Prophet's Song y una hermosa balada acústica titulada '39. Aunque los chicos muestran algunas tendencias excesivas en esta área (hay un par de puntos en el disco donde me encuentro haciendo eco de la petición del grupo de «Ooh, dame una buena guitarra» de su Sheer Heart Attack), no se puede negar que Queen definitivamente ha puesto sus miras en convertirse en mucho más que otra banda llamativa, inglesa, de rock duro.

El álbum también refleja la continua fascinación del grupo por las caprichosas melodías influenciadas por los años 20 y 30 como el pegadizo Seaside Rendezvous. A pesar de que A Night At The Opera carece de algo del impacto inicial del trabajo anterior del grupo, lo compensa con creces con un conjunto más completo y consistente que definitivamente debería servir para ampliar el atractivo del grupo.

Combinado con las excepcionales habilidades de composición del grupo (excepto por una breve interpretación de God Save The Queen que cierra el segundo lado, los once temas son originales del grupo) que combinan letras inteligentes, a menudo conmovedoras, con atractivas melodías arregladas, Queen tiene un envidiable arsenal de armas musicales a su disposición.

Después de conquistar su Inglaterra natal (A Night At The Opera alcanzó el primer puesto en las listas de éxitos de los álbumes británicos a las pocas semanas de su lanzamiento, y los tres esfuerzos anteriores del grupo actualmente ocupan posiciones en el Top 50), Queen parece lista para dejar su huella en Norteamérica. El potencial del grupo es prácticamente ilimitado, lo que indica que Queen está destinada a tomar finalmente su lugar entre el pequeño puñado de actos verdaderamente importantes que trabajan en el rock hoy en día.